Por Jaén, con motivo de la Carrera de San Antón


Jaén. Ubicación geográfica de la conocida como capital del Santo Reino, de la que se cuenta su enconada (y sin embargo desigual) rivalidad regional con la cercana Linares. Los típicos piques que muchas veces ha canalizado el fútbol y tal. La ciudad de Jaén, una población de más de 115.000 habitantes, vive recostada en las faldas de la montaña donde se asienta el castillo de Santa Catalina, el Cerro de Santa Catalina (unos 810 metros), y en sus cercanías cuenta con algunas concentraciones montañosas del Sistema Subbético, como Sierra Mágina o Sierra de la Pandera, que con sus alturas que superan holgadamente o frisan los 2.000 metros fabrican buena parte de los frescores, cuando no lluvias, nieves o aguanieves, que mecen el clima jienense. Jaén es fundamentalmente una ciudad con vocación de servicios, puesto que el tejido industrial provincial está más asentado en otras poblaciones. [Mapas VíaMichelin]

Carrera Urbana Internacional Noche de San Antón. Perfil de la prueba en su edición de 2015. Tanto los datos de altura como los de longitud no se ajustan a la realidad, puesto que la carrera se mueve entre los 550 y casi los 700 metros de altitud; y su kilometraje oscila en torno a los 10 kilómetros. El perfil, empero, se ajusta a lo que encontraremos en esta carrera popular ya metida en la treintena y de incomparable ambiente festivo.

Carrera Urbana Internacional Noche de San Antón. Recorrido de la prueba por las calles de Jaén en su edición de 2015. La avenida de Andalucía vuelve a acoger el punto de salida y de llegada tanto de la carrera para infantes, evidentemente de menor kilómetraje, como de la destinada para los mayores, que sigue este recorrido. La larga subida por la avenida de Madrid y la más corta pero también más empinada de la Senda de los Huertos maduran los gemelos antes del tramo en descenso por el entorno de la catedral y por la calle Bernabé Soriano, más conocida como La Carrera, que nos acaba dejando en el falso llano final que tanto se agarra. Existen carreras que son una magnífica forma de hacer turismo con zapatillas... y esta, a pesar de ser de noche, es una de esas privilegiadas.

Albergue Juvenil de Jaén. Gestionado por Inturjoven, estamos ante una magnífica alternativa, mucho más económica, al hotel tradicional. En un viejo hospital recuperado para la causa, el de San Juan de Dios, una instalación funcional, bien equipada, ideal para el repose en un contexto donde manda la calle y el paseo, y pionera en Europa en cuanto a accesibilidad. Se encuentra en la calle Borja, casi vecino del Teatro Infanta Leonor, y es la base logística elegida para esta aventura corricolari.

Albergue Juvenil de Jaén. Detalle del friso de la portada del antiguo hospital de San Juan de Dios, centro médico que también ejerció durante muchos años de Escuela de Enfermería y, durante la Guerra Civil, de refugio antiaéreo. Obsérvese que en el centro aparece una representación de la medicina bastante recurrente en lo escultórico y lo pictórico: la serpiente enrocada en un copa, en este caso, siguiendo los cánones del Bastón de Esculapio. Las obras de conversión ultimaban en 2015 unas reformas en el SPA, pero el salto de edificio histórico abandonado a albergue con bastante vida y concurrencia se dio en 2007.

Albergue Juvenil de Jaén. Así se dispone una de las habitaciones de la segunda planta, para dos personas con otras dos opcionales gracias a unas camas plegables.

Albergue Juvenil de Jaén. Instalaciones. Patio exterior. E imagen corporativa de la red de albergues...

Ante el albergue se entiende una plazuela un poco feucha, por eso del abuso de los nuevos materiales construtivos y la presencia de edificaciones modernas, un tanto impersonales. En esta plazuela comparten influencia el albergue y el teatro Infanta Leonor. Y se puede disfrutar de alguna vista maja sobre el Cerro de Santa Catalina y hasta de su castillo...

... Aunque para ver la fortaleza jienense hay que moverse un poco. Ahí está el castillo, presidencial sobre un entorno forestal y accesible, a pata, a través de un callejeo por Jaén y un tramo de senderos y trochas, desde el mismísimo albergue.

Calle Condesa, en la parte trasera del teatro Infanta Leonor y junto a la calle Molino de la Condesa. Allí podremos contemplar algunos restos de la vieja muralla musulmana. Un pequeño lienzo de la cerca que protegía un acceso, hoy en día desaparecido, conocido como Puerta del Aceituno.

Cubo y lienzo del tramo de muralla que se conserva, en el entorno del teatro Infanta Leonor, de la desaparecida Puerta del Aceituno, una de la diez con las que contaba la ciudad. Calle Molino de la Condesa.

La calle Borja, la del acceso al albergue, revira y se estrecha en su perímetro.

La calle Borja es un rampón de dos dígitos si se accede a ella, como es normal,desde la calle Millán de Priego. Y como se aprecia en esta y en la foto anterior, es una ciudad muy proclive a las pintadas en sus paredes...

Teatro Infanta Leonor, un diseño del arquitecto José Manuel Pérez Muñoz en un solar irregular ubicado a los pies del castillo, en una vieja zona intramuros, fue inaugurado el 11 de enero de 2008 por los entonces Príncipes de Asturias, Don Felipe y Doña Letizia. A la derecha se aprecia perfectamente un cubo de la vieja muralla.

Jaén. Entorno de las calles Rey Alí y Puerta del Aceituno.

La descendente (o ascendente, según nuestro destino) calle Alberca une el entorno del teatro Infanta Leonor, más bien la avenida del Ejército, con la calle Sagrado Corazón de Jesús. Y nos quitamos un buen trecho de altura en el casco urbano durante el camino. Accesos (inferiores) a una zona verde de la barriada de La Magdalena.

Según bajamos la calle Alberca nos recibe la Marisquería-Restaurante Casa Nati. Calle Sagrado Corazón de Jesús.

Calle Cazorla.

Plazuela que alimentan las calle Virgen del Carmen y Condestable Iranzo y donde arranca la calle Salvador Vicente de la Torre.

Castillo de Santa Catalina. Siempre presidencial sobre la ciudad de Jaén, esta fortaleza ofrece panorámicas muy estéticas desde cualquiera de las calles que se aproximan a su base desde la avenida de Andalucía. Aquí, vistas a través de la calle Salvador Vicente de la Torre.

Grandes vistas del cerro de Santa Catalina y los barrios de La Magdalena y San Vicente de Paul desde la avenida de Andalucía. Nos aprovechamos de la ruta ascendente que marca una calle San Lucas rica en casas bajas de fachadas coloridas.

Castillo de Santa Catalina, a través de la calle San Lucas.

¡Carrera San Antón de Jaén!



Momentos previos a la salida.

Unos cañones de luz proyectan sobre los edificios vecinos lemas y mensajes alusivos a esta prueba atlética.

¡La salida!







Luces de Navidad.



Las antorchas de San Antón.







Rápido tramo de la carrera que pasa, en medio de un ambientazo espectacular, junto a la catedral.



Catedral de Jaén, de las más hermosas de toda España.



Los focos en la zona de meta.



Carrera Popular Noche de San Antón. Dorsal y Medalla sobre plano turístico.

La calle Fernando IV (derecha) nace cual curva de herradura proyectada sobre la más favorable y benigna Millán de Priego.

Pilar del Arrabalejo. Los vecinos del arrabal de la Puerta de Baeza querían suministro de agua, lo solicitaron al cabildo municipal y éste apoyó los trabajos a partir del caudal de La Magdalena. En 1573 "vio la luz" esta infraestructura que hoy en día se encuentra en la calle Millán de Priego, haciendo esquina con la calle Fernando IV.

Terrazas y balcones en la calle Millán de Priego.

Caño del Pilar de Arrabalejo.

Vivienda rehabilitada de estética fin de siglo.

Plaza de San Agustín, desde la plaza de los Jardinillos.

Edificio palaciego que realmente es un convento: el de San Antonio, gestionado por las Siervas de los pobres. Frente a la plaza de los Jardinillos.

Calle Federico de Mendizábal. Buena zona para tapear. Y ruta directa para unir Jardincillos con Constitución. A la izquierda La Quintana. A la derecha, Taberna Andaluza.

De tapas en La Quintana.

Taberna Andaluza. Rincón flamenco.

Sobrecarga publicitaria en la calle Federico de Mendizábal.

Un negocio con la estética y la imagen cuenta como reclamo comercial (nunca mejor dicho) estas posaderas de lustrosos cachetes.

Plaza Dean Mazas.

Una sucursal bancaria se ha hecho fuerte en este edificio de aires palaciegos ubicado en la plaza Dean Mazas, allí donde arranca la calle Pescaderías. El Palacio Vilches o de los Vilches.

Plaza del Pósito. Irregular, desnivelado pero encantador enclave de Jaén.

Plaza del Pósito. Hermosas fachadas regionalistas. En el edificio de la izquierda se encontraría el antiguo Pósito municipal, de tres plantas, que fue derribado en 1921.



Calle Bernabé Soriano, mucho más conocida por los jienenses como La Carrera porque en ella, nacida en el siglo XV, se acabarían disputando durante muchas fiestas espectáculos de carreras a caballo. Un magnífico lugar, en pendiente, para contemplar diferentes interpretaciones de fachada. Al fondo, presidencia, las torres de la catedal.

La Carrera. Calle que conecta una Jaén más vieja con una Jaén más moderna desde la plaza de San Francisco (al fondo) a la de la Constitución, popularmente conocida como de las Palmeras. La calle está tomada por un amplio repertorio de fachadas solemnes.

La Carrera. Hoy en día porta el nombre de uno de los hijos ilustres de la ciudad, un célebre médico del siglo XIX.

La Carrera.

La Carrera.

Diputación Provincial de Jaén, ubicada en el llamado Palacio Provincial. Edificio de finales del siglo XIX que se levantó allí donde durante muchas centurias creció el convento de San Francisco, el mismo que hoy le da nombre a la plazuela que se extiende ante esta institución política.

Calle Ramón y Cajal.

Calle Almenas. Estrecha, empedrada y vecina de la catedral.

Casa de aire típicos, ajena a toda reforma, en el nacimiento de la calle Portillo, junto a la catedral de Jaén. Nosotros caminamos, empero, por la calle Carrera de Jesús.

Olivares de Jaén, perceptibles ya desde el callejero más céntrico. Calle Abades.

Catedral de Jaén. Una visión lateral. Caminamos por la calle Carrera de Jesús con la cabeza bien ergida. Es un templo que invita, desde luego, al estirarse todo lo posible para la contemplación.

Catedral de Jaén. Detalle de naturaleza heráldica en un lateral.

Ayuntamiento de Jaén. Su sede es conocida como Palacio Municipal y presenta una ubicación inmejorable. No tan buenas son su cuentas: Jaén es el ayuntamiento más endeudado por habitante; o al menos lo era en 2014. Ideado por Ignacio Aldama y Joaquín Saldaña en el último lustro del siglo XIX, construido en el primero del XX, el consistorio aprovechó el solar del Palacio de Montemar. Tuvo que llegar un arquitecto municipal, mediado el siglo XX, para afrontar la última gran reforma de una fachada que no llegó a agradarle nunca al vulgo.

Catedral de Jaén, más oficialmente "Santa Iglesia Catedral de la Asunción de la Virgen". Uno de los mejores ejemplos de catedral renacentista de Europa que se levantó sobre otra anterior, de estilo gótico, y a su vez, sobre una antigua mezquita musulmana a la que no le suponemos estas mismas dimesiones ni de lejos. Contando con muchas aportaciones posteriores, la idea original corresponde al manchego Pedro de Vandelvira. La fachada, empero, destaca por elementos barrocos propuestos por Eufrasio López de Rojas y su discípulo Blas Antonio Delgado.



Catedral. Efecto ojo de pez sobre una fachada sobria y sublime cuyos trabajos de construcción (no de la fachada, sino de todo el templo en sí) se dilataron durante casi dos centurias (concretamente, entre 1540 y 1724).

Catedral de Jaén. Detalle ornamental de la fachada: relieve de San Miguel impartiendo mandoblazos. Se ubica sobre la llamada Puerta de los Fieles, uno de los tres accesos (el de la izquierda) que presenta la fachada principal.

Catedral de Jaén. Fachada. En la parte superior encontramos esta concentación de esculturas en las que aparecen representados San Fernando (en el centro), quien tomó la ciudad en 1246. A su izquieda, San Mateo y San Juan. A su derecha, San Lucas y San Marcos. Fernando III de Castilla y los cuatro evangelistas, en definitiva.

Torre norte. Visión lateral desde la calle Camapanas de la torre que posee el campanario... y que cuenta con un reloj integrado en su cuerpo.

Calle Campanas.

El pulidísimo pavimento de la peatonal calle Cerón. En vez de ingresar en esta calle por aquí, seguimos rodeando la catedral para regresar a la plaza de San Francisco.

A este punto, por este negocio con una vecina parada de taxis, le dicen simple y llanamente La Colombiana. Está en la plaza de San Francisco y es una de las formas de abandonarla. Y de retomar la calle Cerón.

La barra. Calle Cerón. Y unas opiniones vía TripAdvisor.

Calle Arco del Consuelo. Estrechísima callejuela donde se concentran algunos de los mejores bares, o al menos los más pintorescos, o al menos los más veteranos, de todo Jaén. Los locales la conocen como "el callejón de los borrachos".

Un joven posa mientras se fuma un cigarro en plena calle Arco del Consuelo, apoyado en la pintada mural artística de la paredes de uno de sus bares.

La Manchega. Esta taberna pugna con la vecina El Gorrión por el honor de ser la más vieja de la ciudad. Según rezan varios carteles, estamos en una casa fundada en 1886, dos antes que El Gorrión. Buenas tapas en un local tampoco excesivamente grande que, eso sí, tiene una bodega con dos siglos de vida en sus entrañas. Aquí, las pertinentes opiniones de otros viajeros vía TripAdvisor.





Acceso a la Taberna el Gorrión (izquierda). Calle Arco del Consuelo, número 7. Un lugar diferente, donde el tiempo parece haberse detenido, donde llegaron a indultar un jamón que hoy en día idolatran y donde ofrecen buenas tapas de la gastronomía típica de la región y de la ciudad. El nombre deriva del mote con el que era conocido su fundador, José María López Cruz.

Esta plaquita inscrutada en el firme empedrado del "callejón de los borrachos" nos recuerda la fecha de nacimiento de la Taberna el Gorrión... Y, de paso, que es un lugar de interés cultural y turístico. ¡Pocos bares pueden decir eso!

Taberna el Gorrión. Interior impactante por su mobiliario de otra época. Pero literal. Lavan los cacharros a mano, en una gran palangana. Solo los numerosos recortes de periódico que cuelgan de las paredes le dan un toque "moderno"... y eso que muchos papeles son de periódicos viejos, viejos. Veámos qué piensan al respecto en TripAdvisor.

De tapeo en El Gorrión. Habas, aceite, quesos...

Las cuentas, en la barra y con tiza. De otro tiempo. A la vieja usanza. El reloj se ha detenido en El Gorrión, sin duda.



Calle de Cerón. Regresamos a esta vía tras salir del "callejón de los borrachos".

Un joven gana altura en el casco viejo de Jaén afrontando una empinada escalinata que le lleva de la calle Millá de Priego a la de las Huertas.

Calle del pintor Carmelo Palomino. Otra ración de escaleras... Esta zona es así: Jaén se allana en sus ensanches, con una geografía más amable; el centro y los primeros ensanches, sin embargo, se negocian bien con escalones o bien con generosas pendientes.

Nos introducimos en la antigua Judería de Jaén, conocida por muchos como Barrio de Santa Cruz. Calles estrellas, sinuosas, irregulares... y que en la noche, en la soledad, imponen cierto respeto por eso del escucharse los pasos propios. Calle las Huertas. Desde el consistorio se quiere poner en valor toda esta zona e incluso promueven "rutas por la judería".

Solares, casas bajas y callejuelas en la judería de Jaén. Calle Remojadero del Pescado.

En Jaén abundan las pintadas de profundo calado...

Plaza del Doctor Blanco Nájera, nombre oficial de la también conocida como plaza de los Huérfanos. El corazón de la vieja Judería de Jaén.

Esta plazuela ofrece este monumento con forma de menorah, el candelabro típico de la liturgia de esta religión. Y un mensaje en su pedestal: "Las huellas de quienes estuvieron juntos nunca podrán olvidarse. En homenaje a las familias españolas en la diáspora sefardí. Las trasas de ken andaron endjuntos nunka podrán ser albadadas".

Estrellas de David en la placa del callejero que nos recuerda que andamos por el Callejón del Gato. En la "zona cero" de la desaparecida Judería de Jaén.





Alcanzamos la plaza de Santa Luisa de Marillac, para los locales la Plaza de Pato, donde encontramos la mole del Palacio de Villardompardo, morada de todo un virrey del Perú, conde de Villardompardo, de nombre Fernando Torres de Portugal. Este palacio de siete plantas es una visita obligatoria si uno se encuentra en Jaén por las vistas que regala desde la terraza de su bar, por los baños árabes (hamman) que esconde en sus entrañas y porque su museo de artes y costumbres populares (inaugurado en 1990) es muy completo. Por no hablar de su carácter gratuito. Estamos, por cierto, ante el conocido como Centro Cultural Baños Árabes.



Palacio de Villardompardo. Patio interior de esta enorme y espectacular casa palaciega del siglo XVI.



El patio, de abajo a arriba.

Vamos a entrar en los Baños Árabes, ubicados en los sótanos de este edificio. Los trabajos de rehabilitación, dirigidos desde 1970 por Luis Berges Roldán, se ganaron el premio Europa Nostra en 1984 por su mimo y su esmero con el patrimonio. Nada menos.

Baños Árabes. Nos encontramos ante el ejemplo más antiguo y mejor conservado de toda Europa (que no es muy difícil) y de todo el norte de África. Junto al castillo y la catedral, son el momumento más emblemático de la ciudad. Con la construcción del palacio los baños quedaron ocultos, pero habían sido usados desde la toma de la ciudad hasta el siglo XV. Serían "redescubiertos" en el primer tercio del siglo XX.



Bóveda y recreación de luceras estrelladas en la sala templada de los Baños Árabes de Jaén, del siglo XI.

Este cristal blindado que hace las veces de pasarela nos permite caminar por algunos de los restos arqueológicos sobre los que se construyó el Palacio de Villardompardo, restos que se remontan a época romana inclusive.



Museo de Artes y Costumbres Populares del Centro Cultural Baños Árabes. Aperos y útiles de labranza.

Museo de Artes y Costumbres Populares del Centro Cultural Baños Árabes. Colección de pilares provenientes de diferentes puntos de la provincia de Jaén.



Museo de Artes y Costumbres Populares del Centro Cultural Baños Árabes. Carromato de fiesta, decorado con motivos coloridos.

Museo de Artes y Costumbres Populares del Centro Cultural Baños Árabes. Pequeña recreación de una escuela.

Museo de Artes y Costumbres Populares del Centro Cultural Baños Árabes. Fotografía en blanco y negro del 'skyline' jienense un siglo atrás.

Museo de Artes y Costumbres Populares del Centro Cultural Baños Árabes. Diferentes útiles de cocina.

Centro Cultural Baños Árabes. Patio interior de estilo toscano.

Centro Cultural Baños Árabes. En su última planta cuenta con una terraza que nos regala unas vistas espectaculares de toda la ciudad. Lástima que sea de noche ya...

... pero así luce, por ejemplo, el castillo de Santa Catalina.

Vistas panorámicas de Jaén desde el castillo de Santa Catalina.

Calle doctor Eduardo García-Triviño López. Realmente toda una avenida. Podemos ver ahí la infraestructura del tranvía, una megainfraestructura que prometía aportarle mucho a la ciudad y que, sin embargo, no ha arrancado su uso supuestamente por un conflicto entre ayuntamiento y Junta de Andalucía: 120 millones de euros de inversión en un trazado de 5 kilómetros y, de momento, una vía muerta.

Plaza Jaén por la Paz. Enorme rotonda donde se encuentra la estación de ferrocarril de Jaén.

Calle doctor Eduardo García-Triviño López.

Calle doctor Eduardo García-Triviño López. Se aprecian perfectamente los trabajos del tranvía. Una plataforma ciudadana, Tranvía Crucis, bromea, parodia y critica toda esta inversión económica en diez paradas.

Calle doctor Eduardo García-Triviño López. Se aprecian perfectamente los trabajos del tranvía. Una plataforma ciudadana, Tranvía Crucis, bromea, parodia y critica toda esta inversión económica en diez paradas.

Una de las diez paradas del travía...

Vías y pintadas. No se usan, pero los cuidados de las vías son esmerados...

Abandonamos Jaén por la avenida de Madrid. En la espina dorsal que ejerce de amplia mediana se observa el trazado del Tranvía de Jaén. Otro proyecto de esos de rentabilidad cuestionada antes y después de las obras.

[ENERO DE 2015]