Aldeanueva del Camino bebe de la Vía de la Plata en la "Suiza extremeña" (noviembre de 2013)


Aldeanueva del Camino. Ubicación geográfica de esta villa cacereña asentada a los pies del Sistema Central, en una zona conocida quizá pomposamente como "la Suiza extremeña", y cruzada por la histórica Vía de la Plata. Esta ruta, de hecho, ha alimentado su notoriedad y ha impulsado su prosperidad durante las centurias pasadas, aunque ahora la moderna autovía se ha llevado todo ese tránsito a las proximidades del núcleo. Nos encontramos a unos 550 metros de altitud. [Mapas VíaMichelín].

Viajando por la Autovía de la Plata, escoltados por el Sistema Central. Al fondo, nevado, se intuye el Calvítero, el pico más alto de Extremadura con sus más de 2.400 metros de altitud. En pocos kilómetros abandonaríamos Extremadura para ingresar en Castilla y León, concretamente en la provincia de Salamanca. Estos paisajes convierten este tramo en uno de los más estéticos de toda la red viaria de alta velocidad ibérica.

El Hotel-Posada Rural Tres Mentira, en Aldeanueva del Camino. Centro logístico de una concentración familiar. Interesante hospedaje que recomendamos. Absolutamente. Su nombre obedece a que Aldeanueva del Camino ni es aldea ni es nueva ni está en un camino (afirmación ésta última más susceptible de ser objeto de debate).

Tres Mentiras. Acceso principal. Porche de entrada.

Vistas sobre las cercanas montañas desde el patio del hotel Tres Mentiras. ¡Si es que está ahí mismo!

Un espacio ajardinado bastante apetitoso. ¿o no?

Parte posterior del Hotel Tres Mentiras. Estas habitaciones, sin duda, tienen las mejores vistas.

Acceso y salida a Las Tres Mentiras.

... Y esta carreterita es la calle Matanzas cuando anda por Aldeanueva... Pero es la carreterilla que conecta esta población con Valdelamatanza, que es un pueblo de Castilla y León, andamos ya por Salamanca, que se encuentra apenas a cuatro kilometrillos. Una aldeíta. De camino llegamos a los accesos al alcornoque de la Fresneda, un árbol singular de gran belleza.

Nosotros vamos en la dirección opuesta a la que se veía en la foto anterior. Y llegamos a un cruce con la antigua N-630, la antigua Vía de la Plata cuando no estaba desdoblada, que en su trayecto por la travesía se tansforma en la calle Gabriel y Galán. Entre las casas se intuye la torre de la iglesia de San Servando, uno de los dos templos de esta población que en otro tiempo fueron dos poblaciones separadas por una garganta y poseídas por dos reinos distintos. Zona de frontera, vamos.

Cercanas e imponentes montañas observadas mientras cruzamos, con mucho cuidado, la antigua N-630. Eso sí, el tráfico de esta carretera ya no es el que era desde que inauguraron la autovía de la Plata en esta zona.

Hermosa publicidad pintada sobre la fachada de una casa de una altura. Industria agroalimentaria en una tierra muy fértil.

Una vieja fábrica de pimientón, Santo Domingo, con su sede en Aldeanueva del Camino. Calle Cañadas.

Casco urbano de Aldeanueva del Camino. Esta calle desemboca en el viejo trazado de la Ruta de la Plata por la población (que a esas alturas se llama calle Severiano Masides), escoltado de hecho por la vivienda que se intuye al fondo.

Callejeando por Aldeanueva del Camino. Contrastes. Travesía Masides.

Fachadas en la calle Severiano Masides. Un trazado nada baladí y con muchísimo peso histórico.

Las montañas del Sistema Central en este rincón de la conocida como Suiza extremeña, contempladas desde el arranque de la calle Severiano Masides.



Reciclando y colocando. Aldeanueva del Camino.

Un rincón urbano peculiar...

Nacimiento de la calle Severiano Masides, a la entrada de Aldeanueva del Camino. Una vista diferente sobre lo que nos sugiere este casco urbano.

Vetustas losas de piedra en los laterales de la calle Severiano Masides. Un pavimento que no puede ocultar su gran valor histórico. ¡Qué de cosas habrá visto! ¡O sostenido!

Recordando a un hijo ilustre... el químico Tomás Batuecas Marugán. Con entrada en inglés en la wikipedia, oigan.

Agua no potable en la fuente ("el caño") que presidente la plazuela que se extiende entre la iglesia de San Servando y la calle Severiano Masides, conocida según reza una plaquita de ceramicas como plazuela de Tomás Batuecas Marugán.

Una de las cabinas telefónicas de toda la vida, junto a la iglesia de San Servando.

Una vivienda en la calle Cañadas-plazuela Tomás Batuecas cuenta en su fachada con una columna inscrustada. Sorprendente remate estético y arquitectónico. ¿Vestigio de algo anterior? ¿Reciclaje constructivo?



Vivienda en la confluencia de las calles Caño y Severiano Masides. Posiblemente rehabilitada, pero estética muy popular.

Aldeanueva del Camino. Fachadas.

Una plaquita con mucha guasa.





Doble balcón en madera. Soluciones de la arquitectura popular.

Aldeanueva del Camino. Acceso a vivienda e la calle Severiano Masides, la "gran vía" de esta población.

El ayuntamiento de Aldeanueva del Camino.

Arquitectura popular en esta especie de "plaza Mayor". Atípica, eso sí.

Callejenado por Aldeanueva del Camino.

Garaje a lo Osborne en Aldeanueva del Camino.

Iglesia de Nuestra Señora del Olmo. Templo del siglo XV. Gran ejemplo del gótico de transición. Atipico acceso hasta su campanario. Esta es la "parroquia de arriba" frente a la de abajo, que es la de San Servando.

El campanario de Nuestra Señora del Olmo. Como si de una inexpugnable fortaleza se tratase en esta toma...



Solución arquitectónica a medio camino entre la arquitectura popular y una estética más modernilla en la calle de la Plata.

Calle de la Plata. Huelga explicar el porqué de su nombre...

Vivienda al contraluz en la calle de la Plata.

Aldeanueva del Camino. Calle de la Plata.

Inscripción en un dintel de piedra que se remonta a mediados del siglo XIX y que imita las maneras romanas. No hay que olvidar que en este asentamiento los romanos montaron un campamento sobre el que acabaría gestándonse lo que es hoy en día la población.



Ayuntamiento de Aldeanueva del Camino.

Escudo de España en azulejería bajo un entablamento maderil.

Columnas en piedra, vigas y estructura porticada de madera. Aldeanueva del Camino.

Acabamos de dejar atrás la plazoleta, realmente ensanchamiento por una confluencia de calles, en la que se encuentra el ayuntamiento y caminamos un brevísimo trecho por la calle Severiano Masides para alcanzar este punto: el céntrico puente de origen romano que salva las aguas de la garganta Buitrera.

Un sol intenso sobre el puente romano sobre la garganta Buitrera. Romano en origen, aunque muy restaurado. Todo hay que decirlo.



Desde el punto más alto del puente sobre la garganta Buitrera... Este curso fluvial nace en la montaña del mismo nombre, un "dosmil" junto al Puerto de Honduras, y cae hacia el río Ambroz en un viaje frenético y vertical magnífico para el senderismo.

El firme del puente de origen romano...

Al otro lado del puente. En otro tiempo hubieramos accedido a otra población. Ahora simplemente estamos en otra calle de Aldeanueva del Camino: calle Olivas.



Otra vista sobre la garganta Buitrera y el puente de origen romano.

Calle Olivas. La Ruta de la Plata sigue su curso...

Plaza del Mercado. Aldeanueva del Camino.

Fuente entre ornamental y "abrevadera" en la plaza del Mercado de Aldeanueva del Camino.



Cafe Bar Español, ideal para echar la primitiva. En la plaza del Mercado, seguimos...

Densos bosques pueblas las cumbres próximas a Aldeanueva del Camino, faldas del Sistema Central ricas en castaños y robles. A sus pies, la vieja plaza del Mercado.

Bar San Blas. Aldeanueva del Camino. Junto a la vieja N-630. No tiene pérdida. Y merece una visita para tapear algo.

Terracita en el bar San Blas.

Económicos cervecita y tapeo en el San Blas. Así da gusto la vida, oigan.

Ración de carne en salsa como tapa a una cervecita. Esto es un lujo, leches.

Vieja edificación de una altura en la calle Gabriel y Galán.

Entre las viviendas se intuye el conocido puente, uno de los testimonios (dicen) romanos de la población y frontera de las antiguas y medievales poblaciones de Casas de Aldeanueva y Aldeanueva del Camino, semilla de la población actual. La primera pertenecía a la Corona de Castilla. La segunda, a la de León. Y entre medias, en términos religiosos, cada una se encontraba dentro de una diócesis diferente. Curiosamente esta situación se mantuvo, por esos de sus dos iglesias, durante mucho más años de la unión administrativa... ¡hasta el siglo XX!



Aldeanueva del Camino. Vista de la población desde el puente que, atravesado por la vieja N-630, salva las aguas de la garganta Buitrera. Estética planta con el Sistema Central a sus espaldas y con la torre de la iglesia de Nuestra Señora del Olmo emergiendo entre los tejados.

Verdes paisajes hacia el norte de Aldeanueva del Camino, cumbres de transición dentro de un Sistema Central que, más hacia la izquierda, escolta y tutela la histórica y dura comarca de Las Hurdes.